Redecker

31 de octubre de 1935, Friedel Redecker, el fundador de la empresa alemana Redecker, referente en la fabricación de cepillos de madera con múltiples usos que hoy tiene más de 85 años de historia, vino al mundo.

No fue hasta 1935 cuando Friedel comenzó con la fabricación de los primeros cepillos artesanales sin saber que su proyecto terminaría convirtiéndose en una empresa.

Su camino no fue un camino de rosas, a pesar de ser ciego desde muy niño, demostró sus habilidades y sus grandes dotes para inventar y crear. Sus ideas fueron apoyadas por su familia resultando en la fabricación de productos artesanales que combinaban la naturalidad, la belleza y la sostenibilidad en un producto práctico y funcional.

51 años después, un 29 de diciembre del año 1986 Friedel Redecker fallece dejando un legado cargado de valores a su hijo, Gernet Redecker, quien asumió el mando y continuó fabricando otros cepillos e incorporando otros utensilios artesanales para cocinas, baños, etc., alcanzando un éxito internacional.

En 2015 esta empresa familiar celebró su 80 aniversario con un amplio catálogo de productos, actualmente accesibles en todo el mundo. 

Desde 1988 hasta 2016 iniciaron grandes cambios en la empresa: participación en numeras ferias ecológicas, ampliación de las instalaciones, apertura de tiendas minoristas, etc., para seguir apostando por productos sostenibles que se fabricaban siguiendo técnicas antiguas, que solo unos pocos dominan hoy y que muestran al mundo la belleza de lo natural, de lo ecológico y de lo artesanal.

Diseño y fabricación artesanal de Redecker

La empresa alemana Redecker destaca por la utilización de gran parte de materiales naturales y biodegradables para la fabricación de sus productos. Entre ellos destacan fibras vegetales como las de coco procedentes de las regiones monzónicas o las de tampico obtenidas de las mesetas sudamericanas para fabricar las cerdas de sus cepillos.

Además, también emplean materiales como la madera de haya, de roble y peral, entre muchas otras, que proceden de bosques europeos y que están sin tratar por lo que la ausencia de barnices otorga aún más a los productos una gran calidad.

Los productos Redecker son productos artesanales que se han convertido en la alternativa perfecta para ayudar a no incrementar los residuos y todos los problemas medioambientales que los plásticos están causando.  

Certificaciones que tiene Redecker

Redecker cuenta con certificaciones como FSC (Forest Stewardship Council), un sello que inicialmente fue creado en Toronto, Canadá, en 1993 y que hoy es ampliamente reconocido como garantía de una gestión sostenible de los bosques. Esta certificación voluntaria permite garantizar que los productos que presentan este certificado provienen de bosques sostenibles.

Proteger los bosques y preservar la biodiversidad han sido objetivos claros para Redecker. De hecho, es socio de la plataforma AKTION BAUM que se encarga de favorecer la investigación sobre plántulas de especies autóctonas que sean idóneas para la reforestación.

Los bosques tienen un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático al absorber los gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono y transformarlo en oxígeno. Es por ello que, Redecker, consciente de la dramática situación forestal apoya estos proyectos para evitar la tala indiscriminada de árboles.

Con la compra de los productos Redecker se apoya la reforestación lo que acaba resultando en la reducción de la huella de carbono, la disminución de la erosión de los suelos, el mantenimiento de la biodiversidad del ecosistema, la disminución de la temperatura del planeta, etc., objetivos del desarrollo sostenible que se incluyen en la agenda 2030 de las Naciones Unidas y de los que Redecker quiere formar parte.

Redecker, un símbolo de tradición y artesanía sostenible.