En primer lugar, preparamos la mantequilla de nueces. Remojamos las nueces durante 8 horas para
activarlas, pasado ese tiempo escurrimos el agua y secamos las nueces ligeramente con papel de cocina. Con la
Personal Blender trituramos las nueces junto al aceite de nuez y una pizquita de sal marina hasta conseguir una consistencia cremosa y suave. Reservamos.