Verter la masa en el
molde. Si el molde no es antiadherente, forrarlo con
papel para horno. Hornear unos 40‐50 minutos a 180 grados. Sacar el plumcake cuando esté bien dorado. Si pasado el tiempo no está lo suficientemente dorado, subir la temperatura a 190‐200 grados los últimos 5‐10 minutos y poner solo por arriba.