Pelar las naranjas dejando al descubierto la pulpa naranja, es decir, extrayendo el pericarpio o membrana blanca que cubre la pulpa de la naranja.
Cortar las naranjas a dados grandes.
Pelar una rodaja de piel fina de naranja y clavarle en la parte interior unos cuantos clavos para no perderlos durante la cocción.
Disponer en una olla de fondo grueso la canela, la naranja en dados, la piel de naranja con los clavos clavados, los orejones y la pizca de sal.
Llevar a cocción suave durante 30 minutos con tapa, remover de vez en cuando.
Añadir el agar-agar, y cocer durante 5-10 minutos más sin tapa removiendo más a menudo.
Apagar el fuego y dejar enfriar un poco.
Extraer la piel de naranja con los clavos y la rama de canela. Embotar