La noche anterior, lavar bien el trigo y dejar en remojo hasta el momento de cocinarlo (mínimo 8 horas).
Pelar la cebolla y picar muy fina, reservar. Pelar y picar en tozos pequeños la calabaza. En una fuente apta para horno, colocar la mitad de la cebolla y la calabaza. Salpimentar al gusto, añadir la cucharada de sirope de agave, un poco de tomillo y de romero fresco y una cucharada de aceite de oliva. Mezclar bien y hornear 15 minutos a 180 ºC. A mitad del tiempo de horneado, remover para que se ase bien por todos lados. Una vez listo, retirar del horno y reservar.
Añadir un par de cucharadas de aceite de oliva en una olla y cuando esté caliente, añadir el resto de la cebolla y sofreír a fuego medio hasta que comience a pocharse. Mientras trocear las setas. Una vez pochada la cebolla, añadir las setas y seguir cocinando hasta que éstas suden y se evapore todo el líquido que sueltan.
Escurrir el trigo y añadir a la olla con la cebolla y las setas.
Añadir el caldo poco a poco esperando a que se evapore y remover para añadir más caldo, igual que con un risotto de arroz.
Una vez que esté el trigo tierno, retirar del fuego.
Servir con la calabaza por encima y unas avellanas tostadas picadas.