Natillas de calabaza y azafrán con migas de almendra y canela
Autora: Maria Cañizares
Natillas veganas diferentes y sin azúcar añadido, ya que el sabor dulce lo aporta la calabaza, el coco y el dátil. Es un postre vegano y apto para personas celíacas, no lleva lácteos, ni huevo y la almendra de las migas podrían cambiarse por pipas si tienes intolerancia a los frutos secos. Otro punto positivo es que las puedes tener hechas con antelación y añadir las migas antes de servirlas. Unas migas crujientes que le dan el contrapunto a la cremosidad de las natillas.Si quieres un postre diferente y 100% saludable, no te pierdas estas natillas de calabaza, que no sólo resultan sorprendentes por su sabor, también porque son súper sencillas de hacer. ¡Espero que te guste!
Las migas las puedes tener en el congelador con antelación y hornearlas el mismo día que vayas a tomar las natillas, o tenerlas hechas ya cocidas en un bote hermético dos o tres días antes.
Para hacerlas, encender el horno a 180ºC.
Fundir el aceite de coco con el propio calor del horno o al baño maría.
Picar los 40 gramos de almendra.
Triturar los copos de avena (por ejemplo, con Personal Blender y mezclar en un bol mediano con el resto de los ingredientes secos: harina de almendra, sal, azúcar de coco, canela y las almendras picadas.
Volcar sobre estos ingredientes el aceite de coco fundido y remover con las manos o una lengua de pastelería hasta que la mezcla esté humedecida por igual.
Preparar una bandeja con papel antiadherente y extender la masa (a 1 cm más o menos) apretando con las manos.
Congelar 10 minutos. Sacarlo del congelador y romper un poco separándolo/rompiéndolo en trozos irregulares.
Hornear durante 13/15 minutos (dependerá del horno). Dejar enfriar en una rejilla y conservar en un tarro de cristal.
Para hacer las natillas
Hervir al vapor la calabaza durante 15 minutos.
Mientras tanto, hervir la leche de coco y cuando rompa el hervor, añadir el azafrán y dejar infusionar 10 minutos tapado.
Triturar la calabaza (todavía caliente) con el resto de los ingredientes e incluir la leche con el azafrán. Tiene que quedar un mezcla cremosa.
Repartir en 4 vasitos y deja enfriar en la nevera tapados, durante al menos 4 horas.
Cuando vayas a consumirlo, sacar los vasitos de la nevera y rellenar lo que falta del vaso con las migas.