Hoy hacemos una mermelada de boniato para despedir su temporada y poder seguir disfrutando de este tubérculo. Pero además, traemos una versión parecida, con otro tubérculo ahora de moda: el ube o patata dulce, que es de color morado y nos permite hacer preparaciones muy llamativas.Aprovechamos la capacidad antioxidante de sus fitoquímicos: el betacaroteno del boniato y las antocianinas del ube. Y al ser mermeladas endulzadas con amasake (endulzante elaborado mediante la fermentación de arroz) en lugar de perjudicar nuestra flora intestinal como ocurriría con una mermelada comercial repleta de azúcar refinado, le aportamos salud y estabilizamos los niveles de azúcar en sangre.¡Tarros con doble colorido, doble beneficio y doble placer asegurados!