Si eres un fanático de la gastronomía thai, te encantará esta receta de curry rojo vegano con verduras y tempeh, un guiso aromático, con su toque picante y que te transportará automáticamente al sureste asiático. La denominación “curry rojo” tanto puede hacer referencia a la pasta de curry rojo como a los platos que se elaboran con dicha pasta (normalmente sopas y guisos). Pero que no te espante el nombre, preparar un cremoso curry rojo vegano es bien sencillo y muy agradecido. Sólo necesitarás una buena sartén o cazuela ancha y algunos ingredientes básicos (tempeh, verduras de la estación, leche de coco y, por supuesto, la preciada pasta de curry rojo, que puedes encontrar en supermercados y tiendas asiáticas).
Cortar el tempeh a cuadrados. En un bol, combinar los ingredientes para el marinado y reservar (durante 1 hora mínimo).
Calentar un chorrito de aceite de coco en una sartén y sofreír ligeramente el tempeh por todos los lados. Retirar y reservar.
Añadir un poquito más de aceite a la sartén. Pelar y cortar la cebolla en juliana y agregarla a la sartén. Pelar y picar los ajos e incorporarlos también. Cocinar durante unos 5 minutos.
Pelar los boniatos y las zanahorias y cortarlos a cuadraditos. Añadirlos a la sartén y cocinar a fuego medio unos 10 minutos.
Incorporar a la sartén el pak choi, el sirope de coco y el tamari. Salpimentar. Dejar que se ablanden las fibras de la hoja verde.
Agregar el tempeh también.
Añadir la pasta de curry roja junto con 2 cucharadas de leche de coco. Mezclar bien para que se incorporen los sabores. Sofreír durante 3 minutos sin dejar de remover con una espátula.
Verter la leche de coco restante con el caldo de verduras y dejar cocinar hasta que el boniato y las zanahorias estén listas (unos 10-15 minutos).
Servir con el zumo de lima y decorar con unos germinados.