Estas tortitas son una forma original y deliciosa de incluir semillas de lino y chía, cúrcuma y copos de avena en la alimentación de los peques. Con estos ingredientes conseguimos un aporte interesante de fitoquímicos, ácidos grasos esenciales y proteínas de alto valor biológico, al combinar la avena y las semillas.Por otro lado, el acompañamiento de las tortitas es clave para la aceptación o no por parte del niño. Por ello, os recomendamos la participación del niño para elegir la cantidad y los alimentos con los que quiera tomar las tortitas: fruta fresca, crema de cacao casera, mermelada o miel por ejemplo.
Mezclar en un bol todos los ingredientes, menos el aceite de coco.
Dejar reposar la mezcla al menos 20 minutos. Lo ideal es dejarla reposar durante toda la noche para que se inicie la fermentación.
Para hacer las tortitas, mezclar la masa y si está demasiado espesa, añadir un poco de bebida vegetal.
Calentar una sartén plana o crepera, untar una cucharada de aceite de coco y una vez caliente, verter media taza de la masa. Esparcir bien con una espátula.
Cocinar por ambos lados hasta que quede ligeramente crujiente.
Notas
OPCIONAL: una cucharada sopera de levadura seca de quinoa