Vivir con alergias alimentarias

Las alergias alimentarias son reacciones inmunológicas de severidad variable, provocadas por el contacto con ciertos tipos de alimentos (2).

Según la organización benéfica Allergy UK, se estima que aproximadamente 11-26 millones de la población europea padecen alergias alimentarias y que la incidencia éstas es mayor entre niños, en comparación con los adultos, con 3-6% de los niños en el mundo desarrollado afectados (1).

vivir con alergias
¿Cómo afectará a mi vida si tengo una alergia alimentaria?

Identificando las alergias alimentarias

 

Hoy en día estamos bombardeados por líneas de “productos SIN” y etiquetas con ingredientes en mayúscula o negrita cuando vamos de compras y nos agobian las leyendas explicativas en menús cuando salimos a comer. Todo esto nos indica que la incidencia de alergias alimentarias está en ascenso, pero nos quedamos con muchas dudas: ¿debería evitar este alimento?  ¿Tengo una alergia o una intolerancia? ¿Cómo afectará a mi vida si tengo una alergia alimentaria?

Cómo distinguir entre reacciones alérgicas y otras reacciones

Una reacción alérgica frente a un alimento es provocada por el sistema inmunológico, de manera parecida a las reacciones alérgicas a polen, al látex o al veneno de una avispa.

A veces nuestro cuerpo protesta contra ciertos alimentos, manifestando síntomas no tan agradables, de manera distinta a las alergias:

  • Reacción metabólica: una intolerancia alimentaria es la incapacidad de metabolizar (digerir) ciertos alimentos tales como grasa, trigo o lactosa. Los síntomas incluyen gases, diarrea o gastritis.
  • Reacciones físicas a químicos naturales: algunas personas son más sensibles a ciertos químicos encontradas de forma natural en alimentos tales como: sustancias laxantes en fruta, salicilatos (químicas que protegen plantas de microrganismos) en frutas, verduras, hierbas;  especias; glutamatos (un aminoácido) como glutamato monosódico.
  • Cambios de humor y/o comportamiento: algunos químicos modifican nuestro humor, por ejemplo la cafeína puede provocar hiperactividad y/o ansiedad.
  • Reacciones físicas a estímulos psicológicos: las emociones como miedo, ansiedad o estrés estimulan la liberación de hormonas que aumentan la respiración y a veces también el tránsito del bolo alimenticio por los intestinos.

Ninguna de estas reacciones es inmunológica y por tanto, no son reacciones alérgicas. Saber más sobre la diferencia entre alergia e intolerancia.

Cuáles son las reacciones alérgicas típicas

Además de protegernos contra cuerpos extranjeros y dañinos como bacterias, virus o parásitos, a veces nuestro sistema inmune ataca a sustancias que se suelen considerar inocuas. Estas sustancias se llaman alérgenos y cuando son atacados por los anticuerpos del sistema inmunológico, se provocan reacciones como(3):

  • Urticaria
  • Picor
  • Inflamación de la cara, la lengua, los labios, los párpados, las manos y/o los pies
  • Erupciones dérmicas
  • Dolores de cabeza, migrañas
  • Nauseas, vómitos
  • Diarrea, a veces con sangre en heces
  • Estornudos y tos
  • Asma
  • Dificultad respiratoria

En los casos más severos, alguien puede sufrir una reacción potencialmente fatal conocida como un choque anafiláctico o anafilaxia, que se expresa en una serie de reacciones alérgicas que incluyen picor, inflamación, dificultad de respiración y pérdida de conciencia.

  • Reacciones inmediatas: son las más peligrosas, porque provocan una inflamación muy rápida segundos después de consumir los alérgenos.
  • Reacciones con retraso: son las que ocurren 24-48 horas después del contacto con el alérgeno y los síntomas son más livianos, por ejemplo tos, congestión.

Pruebas médicas

¿Reconocéis estas reacciones y síntomas? ¿Sospechás ser alérgico/a, o que tu hijo puede tener alergia a algún alimento?

Dado que la tendencia de ser alérgico/a en general es heredada, la salud de nuestros padres puede ser la primera indicación. Si uno de nuestros padres padece de un o varias alergias alimentarias, la probabilidad de que también seamos alérgicos (a los mismos o diferentes alimentos) es dos veces más alto. La probabilidad es aún mayor si los dos padres tienen alergias.

Para identificar los alérgenos específicos es fundamental consultar a vuestro médico, quien puede proponer dos métodos:

  • Dieta de eliminación: en la que se quitan los alérgenos más comunes de la dieta y se vuelen a introducir uno por uno hasta que se provoque una reacción.
  • Análisis de sangre: que pueden identificar los anticuerpos a alérgenos específicos presentes en el organismo (2).
alergias alimentarias
Todos los alérgenos comunes tienen que “aparecer obligatoriamente en el listado de ingredientes.

Evitando alérgenos en el día a día

La mejor manera de evitar los alérgenos es saber exactamente qué contiene la comida que se toma.

Esto, sin embargo, no es tan fácil debido a la variación de términos, los seudónimos para nombrar ingredientes y los diferentes procesos de producción entre marcas. Por tanto, tenemos que aprender a decodificar las etiquetas.

Afortunadamente, según legislaciones en España e internacionalmente, todos los alérgenos comunes tienen que “aparecer obligatoriamente en el listado de ingredientes con una referencia clara a su nombre” (3).

Los siguientes son los 14 alérgenos oficiales que provocan la mayoría de incidencias de reacciones alérgicas:

  • Cereales que contengan gluten y productos derivados.
  • Crustáceos.
  • Huevos.
  • Pescado.
  • Cacahuetes.
  • Soja y productos a base de soja.
  • Leche y sus derivados (incluida la lactosa).
  • Frutos de cáscara (almendras, avellanas, nueces, anacardos, pacanas, castañas de Pará, pistachos, nueces de macadamia y nueces de Australia y productos derivados).
  • Apio.
  • Mostaza.
  • Sésamo.
  • Anhídrido sulfuroso y sulfitos en concentraciones superiores a 10mg/kg ó 10 mg/l expresado como SO2.
  • Moluscos (3).

Cabe destacar que un individuo puede ser alérgico a cualquier alimento, no sólo los mencionados. Algunos alérgenos menos comunes incluyen:

  • Maíz.
  • Carne.
  • Gelatina.
  • Semillas de girasol y de amapola.
  • Cilantro.
  • Frutas y verduras como: manzana, zanahoria, melocotón, ciruela, tomate, plátano, kiwi, champiñones, ajo, cebolla, repollo, remolacha, pepino etc.

La semana que viene os facilitaremos unos consejos para convivir con una alergia alimentaria, para comer fuera de casa y para hacer la compra.

¡Salud para todos!

Fuentes de información

Consejos para convivir con una alergia alimentaria >>

Louise Spratt - Publicaciones
Nuestra colaboradora Louise Spratt, nos dará información muy interesante sobre la alimentación saludable y recetas caseras sanas.

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1 comentarios en “Vivir con alergias alimentarias

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